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lunes, 21 de noviembre de 2016

Así es como se calla a un guerrero de justicia social que explota en ira cuando alguien critica a los LGTB

Un buen día un guerrero de justicia social genérico y del montón (llamemoslo pendejo), me cuestionó sobre un comentario que hice sobre alguien (llamemoslo brabucón) que se burlaba de un fanático religioso que salió con sus babosadas en una noticia de cierto portal, en donde se hablaba del arrepentimiento de los transexuales por su cambio de sexo y de como la comunidad LGBT los acosaba y atacaba, e incluso orillaba al suicidio, sólo por arrepentirse. Con esto como contexto yo le dije a ese brabucón que en el fondo el era igual de fanático que el religioso-tarado ese, y que aunque sus opiniones (o fe's) estuviesen encontradas, si estuvieran del mismo bando serían iguales y podrían llegar a los grados mas altos de la locura (si, fue una opinión trollera). Pues bien, a continuación les muestro la respuesta que le dije al pendejo ese, cuando me cuestionó y pregunto que cual era la fe del brabucón:

"(tuya y de el) es la creencia total y absoluta de que la sexualidad es el camino a la felicidad, y que, por tanto, debe de ser el eje rector de la vida. Además, presuponen en acto de fe ciega que de entre las distintas variantes de la sexualidad, la homosexualidad es equiparaba e igual a las demás, sin cuestionarse siquiera que tan buena es emocional y cognitivamente hablando. La presunción es "sexualidad = felicidad, preferencias = sexualidad, por lo tanto, preferencias = felicidad" lo cual es un completo error. Ni la felicidad proviene de la sexualidad, ni tampoco las parafilias son equiparables a la sexualidad estándar. Vamos, que te lo digo directamente, las parafilias tienen un precio de sufrimiento (inherente e ineludible para existir como deseos basados en la necesidad y la carencia), y la sexualidad estándar, como no se sustenta forzosamente en la necesidad (o sea que no requiere de la carencia y el dolor que esta conlleva para existir), puede dar o quitar la felicidad, dependiendo de todo lo emocional que lo acompañe. Ustedes los del LGTB, defienden su estilo de vida a capa y espada, y está bien, es su decisión, y es parte de su ejercicio de la libertad, pero el problema es que en sus actos de fe ciega tratan de imponer sus gustos e ideas en los demás, por la fuerza, cuando en el fondo la mayoría reconocemos que la felicidad no se encuentra en la sexualidad y mucho menos en las parafilias....... Y francamente es muy triste que una persona base su personalidad, pensamientos, actitudes, y acciones enteras dependiendo de lo que haga con sus genitales. Y tu, don guerrero de justicia social, justamente haces eso, al igual que todos tus colectivos afines."

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